HORMIGAS

Hormigas y más hormigas; las "siquisapas". Cuentan las leyendas y los mitos que su madre es una culebra de dos cabezas que en ocasiones se ve y aleja a los cazadores de su madriguera de tanto susto. Cierto o no la verdad es que cada mes de septiembre hasta fines de octubre y extraños meses de noviembre, las "siquisapas" prácticamente se derraman en cada "lomada" que se pueda encontrar.

Las que salen de día son más grandes, ricas y aromáticas. Las que salen de noche no lo son tanto. A veces salen en cantidad y otras no. Para que esto no suceda se requiere de mucho sigilo y paciencia. Un siencio casi sepulcral pues nadie se da el lujo de hacer ruido ya que se espantan facilmente. Para la caza se requiere de una armadura especial: botas grandes de jebe, pantalón grueso, camisa larga, machete, fósforos, linterna, mechero o candelabro, varios recipientes o costales y un buen café de olla además del fiambre.


Esperar?. Antes no había que esperar ya que las hormigas aletean por la ciudad como plaga invasora acompañadas previamente de las famosoas "aniras"; unas hormigas más pequeñas pero largas, color café, de grandes alas que advertían la salida de las "siquisapas". Esto sólo sucedía cuando una lomada no había sido descubierta o avistada y las hormigas se derramaban hasta coger el vuelo a diestra y siniestra. Hablar de este detalle es hacer memoria de tantos recuerdos de hace 10 años quizás...

Esperar es un término que requiere paciencia; mientras tanto se arma la conversa; taza de café en mano soplando para no quemarse si la caza es por la noche. Poco ha poco van saliendo "washos"; que son las hormigas poco desarrolladas y de un color amarillo ambar muy característico y sabor discreto, a su paso o entre ellas aparecen los "curuinsis"; hormigas transportadoras de hojas y entre estos también o en seguida hacen gala las "siquisapas". Salen unos, salen otros, salen todas pero salen... el mechero o candelabro ha de servir para atraerlos a la luz ya que suelen volar gracias a sus enormes alas. Despegar vuelo les toma casi un minuto con el vertiginoso aleteo; así que hay que evitar que suceda esto metiéndoles en los recipientes o sacos resistentes pues tienen unas tenazas que destrozan todo. En ocasiones he visto gente con guantes para esta dolorosa faena. Cuando el cielo se rompe; truenos y relámpagos hacen correr a la gente a preparar su armadura y lanzarse a la caza. Si lloviera entonces la cosa se complica porque no habrá lomada. Precisamente este es el nombre que se le dá a la caza misma. No es raro escuchar algunos dichos: "hoy va ver lomada" "vamos a hormiguear", entre otros. Lomas y lomadas habían por montones hasta hace unos 10 años; no era raro ir cerca de los alrededores de la ciudad para revisar las lomadas previamente a los días de caza. Encontrar lomadas hoy es más complicado y cada vez más lejano. La migración ha avanzado tanto que los bosques se han talado y las lomadas han desaparecido para dar paso a las chacras y arrozales.

Las hormigas son; desde hace mucho, un manjar exquisito y de lujo. A sabiendas que la población oriunda de esta zona espera con ansias este exótismo, los migrantes han decidido darse a la caza y ponerle un precio exorbitante. Una taza pequeña de café puede alcanzar a costar el valor de 5 soles y en días de abundancia a 4 soles. Esta cantidad es sólo un bocado que se queda entre los dientes. El kilo alcanza precios entre 40 ó 50 soles y en tiempos de hartazgo hasta 30 ó 25 soles.


Las lomadas no son si no formaciones de tierra arcilloza donde las hormigas gentilmente hacen sus nidos. Pueden llegar a tener varias salidas complicando la caza de las "siquisapas" si sólo se cuenta con una persona. Estas lomadas se encuentran en la espesura de la selva o bien en campos talados que han dejado a la vista grandes espacios de lomadas. Una vez más quiero recordar que los washos tienen un sabor diferente a las siquisapas y éstas a su vez se diferencian en sabor, aroma y tamaño entre las nocturnas y diurnas. Las hormigas aletean exclusivamente en la selva alta norte del país; (Amazonas; límite con San Martín y en ciudades como Rioja, Moyobamba y Lamas; por su altitud), hasta los extremos de Colombia casi al límite con Panamá. Las "hormigas culonas" para ellos y "siquisapas" para nosotros. También las podemos encontrar en la extensa amazonía brasilera que por cierto las dejan vivir tranquilamente.


Arduo trabajo para la caza y arduo trabajo para quitarle sus magníficas alas y luego sumegirlas en agua, escurrirlas y posteriormente asarlas hasta quitarles la humedad y esten listos para freirlas en un poquito de manteca y sal. El aroma que despide es realmente abrumador. Media ciudad puede llegar a oler las hormigas fritas y queda impregnado donde sea. En el caso de los "washos" no sucede lo mismo pero si tiene también un ligero aroma y un discreto sabor. ¿Cuándo están listas?. Pues cuando crees que le falta, es porque ya están, oséa cuando "la colita", "el culito" o "el potito" como suele llamarse aquí, el cual posee grasa queda ligeramente dorado, casi de un color marrón muy suave. Este exótico manjar se puede guardar en papeles especiales llamados "craff" o papeles de sacos de azúcar. Bien acondicionado puede llegar a durar un año. Se pueden volver a calentar muy rápidamente y despidiendo el mismo aroma y el mismo sabor que los caracteriza.

Me atrevo a pensar que puede servir como una exótica salsa, como una pequeña entrada, o para un tacacho y tanta cosas más. Es interesante que un empaquetado al vació colocaría este manjar en las mejores mesas de restaurantes de fusión. Conforme pasen los años es probable que la especie desaparezca debido a la tala indiscriminada de los bosques así como la constante migración de pobladores altoandinos que depredan y arrasan con todo.





NOTA: para mayor información no dude en comunicarse a la siguiente dirección: iberia19@hotmail.com


CECINAS



Las cosas ricas tiene un origen. Hay cecinas secas, cecinas ricas y cecinas que tienen mucho de ahumado que verdaderas cecinas. Los hay de carne de res, de chancho, sajino, añuje y hasta de venado. Dobles y jugosas, delgadas y duras. Cada cual parece tener un fin pues he podido ver que muchas veces se hacen sopas, guisos, arroces, frito, salteado, para relleno y tantos otros platos ricos con cada cual.

Esta exquisitez se prepara generalmente de carne de chancho utilizando la parte de la pierna que es más rica. Nuestra cecina tiene una textura casi delgada y muy duras o toscas en ciertas partes. Aquí en Rioja tenemos la costumbre de agregarle bastante achiote fresco o seco a la carne de chancho cecinada y su toque de sal.


Fuego que, se convierte luego en brasa dispersa a mediana altura es suficiente para colocar las "sábanas" de cecina en una barbacoa hecha de "cañabravas" tapado con hojas frescas y aromáticas de bijao. El tiempo de ahumado dependerá de la persona que prepare esta delicia. Finalmente se obtiene una cecina de sabor y color intenso que cuando se fríe pinta el aceite de un color espectacular debido al achiote.

En otras zonas del departamento de San Martín la cecina no tiene mucho color, lleva ajinomoto y es de textura más gruesa. Sabe a leña en algunos casos. Este tipo de cecina la podemos encontrar en los mercados de Moyobaba, Tarapoto, Yurimaguas y más lejos aún, en la ciudad de Pucallpa.


Hablar de cecina es pensar que sólo puede utilizarse frito y cocidas en sopas. Generalmente es el uso que siempre le hemos dado a esta maravilla de carne. Puedo advertir que es bastante versátil y tiene una serie de posibilidades de colocarse entre los mejores productos gourmet. Me agrada creer que sirve para preparar aceites al momento de freírlo, rellenos, de guarnición para otros platos, para hacer arroces, suculentos aderezos, para aromatizar otras carnes, como plato principal y cuantas cosas más.

No es de extrañar que haya recaído por estos parajes la nueva tecnología para preservar mejor las carnes por un largo periodo. En mis tiempos de retoño puedo recordar que la carne se enviaba envuelto en papeles de costal de azúcar. Esta maravilla moderna de empaquetado al vacío ha revolucionado la industria en bien del consumidor. Tarapoto cuenta ya con varios puestos en el mercado que disponen de personal para su empaquetado al momento.


Los envíos a la costa del país casi en su exclusividad para restaurantes amazónicos son el motor de avance de este envasado. Conforme se sigan inaugurando fuera de nuestros límites la demanda será cada vez mayor y tendrá la posibilidad de colocarse en las mejores ollas de los grandes restaurantes gourmet de la capital y por qué no pensar; fuera del país.



NOTA: para mayor información no dude en comunicarse a la siguiente dirección: iberia19@hotmail.com